julio 15, 2011

Mitología Comparativa [justificación]

Hace un par de años cuando visitamos el Museo Nacional de Antropología (de la ciudad de México) a la Mire le intersó bastante el tema de los dioses prehispánicos por lo que buscamos en su respectiva libreria un libro que hablara o que explicara la mitología mexica ó azteca ó prehispánica con sus diversas deidades y pues.... no habia un libro con tales características ¬ ¬, había libros sobre las piezas expuestas en el museo o sobre un pueblo o un tema en específico y de los cuales, los que se veían interesantes, estaban en inglés o francés ¬ ¬, también había libros de otras regiones como Tajín o Chichén Itzá e inclusive de la cultura egipcia..... que .... pues como que no venía mucho al caso porque en aquel entonces no había una exposición dedicada a esa cultura.
En fin... otro día nos fuimos a buscar, en librerias grandes, un libro que satisfaciera nuestras ansias de conocimiento y dimos con unos cuantos que compramos y luego de comenzar a leerlos nos dimos cuenta de lo caótico que resulta el tratar de entender, o mejor dicho, identificar a las deidades del México antiguo en las historias, las crónicas y los cantares que ahí se explican. La razón principal de eso se entiende -luego de que uno aprende- que antigüamente el asimilar dioses y agregarlos a tu propia religión era una practica que se llevaba a cabo en aquellos tiempos, de modo tal que si una cultura dominante llegaba y veía que sus dioses eran inferiores pues los elevaban al nivel de las deidades más arraigadas y esto da como resultado varias "versiones" de un mismo dios que ya de por sí (aprende uno también) los dioses tenían a veces varias advocaciones (versiones de sí mismos, digamos) así como que para varios pueblos era muy importante el concepto de la dualidad por lo que también es común encontrar que un dios era a la vez Hombre y Mujer o que según su advocación se le representaba de un sexo o de otro.
Lo anterior me llevó a darme cuenta que es más fácil identificar de quién o de qué se habla en las historias cuando uno reconoce los aspectos y origenes de una deidad o mínimamente lo que representa; así como uno aprende a relacionar los nombres Osiris, Zeus, u Odín por el constante bombardeo en películas, series, canciones, documentales, etc.
Es por eso que me he permitido la osadía, ó el atrevimiento, ó la aberración, de crear un cuadro explicativo de las deidades prehispánicas y su relación entre sí (unas con otras), entremezclando y haciendo coincidir un poco las contradicciones que surgen sobre algún dios y su origen según los distintos pueblos que le adoraban. Con esto no pretendo más que un entendimiento (superficial, pero entendimiento a fin de cuentas) para que la Mire (así como mis hijos del futuro) puedan conocer  e identificar a los dioses de mi país y que puedan reconocer fácilmente, por ejemplo, a Tláloc como dios de la lluvia de igual manera que se identifica el nombre de Poseidón como dios del mar.
 

                                  Rea                                Coatlicue                                    Isis                     

No hay comentarios:

Publicar un comentario